Discriminación de Algunos en la Comunidad LatinX Hacia la LGBT: Otra Forma de Defraudarnos

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Por: Graysen Martínez Ocasio*/Publicador de TRT—

Hace poco los cristianos celebraron las Pascuas. Es un año más que he observado lo que eso parece significar para muchos. Las acciones de algunos cristianos demuestran una carencia de gratitud hacia otros miembros de comunidades marginadas, durante todo el año, no tan sólo en la santa semana. ¿A qué me refiero con esto? Me refiero al prejuicio que existe en algunas comunidades discriminadas hacia la comunidad LGBT. En específico deseo hablar sobre la comunidad latinx o hispana.

Recientemente muchos de ustedes nos han visto envueltos, a nosotros en el periódico “The Rainbow Times” en luchas que incluyen derechos de inmigrantes y de los votantes hispanos en Salem, Mass, en el pasado en luchas de derechos reproductivos de la mujer, de #BlackLivesMatter y otras. Lo que hemos hecho lo hacemos porque firmemente creemos en la justicia social global. Pensamos que no debe haber desigualdad o injusticia hacia ninguna comunidad. Una persona de la comunidad Latinx a quien le tengo mucho respeto y admiración me dijo no hace mucho tiempo, “Ustedes (refiriéndose a Nicole, a nuestro equipo, y a mí) verdaderamente creen en las luchas de todos los grupos y lo demuestran con sus acciones. La mayoría de las personas aquí no actúan de esa forma”. Me quedé pensando en esas palabras. En el momento, pensé: la comunidad latinx de Salem nos apoya en nuestras propias batallas. Sin embargo, no me olvidé de su comentario. Y luego me di cuenta de otras acciones.

Como suele suceder, no mucho tiempo más tarde me percaté de que la persona estaba en lo correcto. Simplemente explicado, muchos de los miembros de la comunidad Latinx me han defraudado con sus acciones hacia la comunidad LGBT. No crea que no sé que es un/a homofóbico/a porque no lo dice directa o abiertamente. El hecho de que alguien tan sólo me habla o me busca cuando necesita de lo que el periódico o yo como publicador le podemos ofrecer es insólito. Sin embargo, así ha pasado. Usted sabe quién usted es.

Hay inclusive miembros de la comunidad Latinx que se acercan a mí y me saludan y luego me preguntan cómo y/o dónde está mi “amiga”. ¿Mi amiga? ¡Qué falta de respeto! Mi esposa es mi amiga, pero no es tan sólo mi amiga, es también mi esposa, mi amante, el amor de mi vida, la persona a la que amo románticamente. Si eso le molesta, no me pregunte por ella, por mi vida, pues ella es parte integral de la misma. De ser así, francamente no merece saber de ella y mucho menos de mí.

Más aún, si no sabe nada al respecto sobre la comunidad LGBT, entonces no pregunte pues puede ofender a otros, hasta herir a seres queridos que quizás ni salen del clóset debido a su homofobia o transfobia. ¿Por qué cree que luchamos por tantos años para obtener el matrimonio igualitario? Fue para obtener los derechos federales que toda pareja casada tiene. No fue para casarnos en iglesias a las que no somos bienvenidos/as. Mucho menos fue para que se refirieran a nuestras parejas como “amigos”. ¿Cómo se sentiría si le preguntaran cómo está su amiga/o al referirse a su esposa/o, novia/o, pareja, etc. La validación de nuestras relaciones—de parejas del mismo sexo y del sexo opuesto— es sumamente importante. Eso no cambia debido a la orientación sexual del individuo o de su identidad de género. Usted ama a quién usted ama. De la misma forma a quien yo amo no le debe molestar y ofender tampoco.

Y, si  va a hablar de Dios, por favor dígame, ¿dónde, en la Biblia a la que se refiere, habló Jesucristo de la gente “gay” de los “transgéneros”? No hay ningún verso que hable de que Jesucristo evadió a la gente LGBT. Francamente, Él no evitó a nadie. ¿No cree que si la comunidad LGBT o la vida de los ‘gays’ hubiera sido algo tan importante para Dios, no hubiese enviado a su único Hijo a llevarle ese mensaje tan relevante a las masas? Parece ser que ese mensaje no fue tan importante para el Todopoderoso. Más aún, para explicar esto en un lenguaje bíblico, cuando un Escriba le preguntó a Jesús en el Nuevo Testamento: “¿Cuál es el primero de los mandamientos”? Jesús respondió (Marcos 12: 18-24): “El primero es: “Escucha, Israel: el Señor nuestro Dios es el único Señor; y tú amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón y con toda tu alma, con todo tu espíritu y con todas tus fuerzas. El segundo es: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. No hay otro mandamiento más grande que estos”.

¿Está usted amando a su prójimo cuando le juzga, cuando le rechaza, cuando le deja de hablar, cuando le abandona, cuando le habla por conveniencia, cuando se cree mejor que él/ella? En Mateo 7: 1-5 dice: “No juzguéis para que no seáis juzgados. Porque con el juicio con que juzguéis, seréis juzgados; y con la medida con que midáis, se os medirá. ¿Y por qué miras la mota que está en el ojo de tu hermano, y no te das cuenta de la viga que está en tu propio ojo? ¿O cómo puedes decir a tu hermano: ‘Déjame sacarte la mota del ojo’, cuando la viga está en tu ojo? ¡Hipócrita! Saca primero la viga de tu ojo, y entonces verás con claridad para sacar la mota del ojo de tu hermano.” Y, sin embargo, aquellos de ustedes que me han mirado y juzgado, saben claramente lo que hacen y lo que han hecho. Por sus frutos les conozco. También, los que de ustedes se han quedado callados cuando pudieron haber hablado para defender a los miembros de nuestra comunidad o han podido unirse en la lucha por nuestros derechos, recuerden que el que calla, otorga. Y recuerdo cuando a las personas que se nos acercaron con palabras de aliento y amor cuando unos sinvergüenzas le pusieron explosivos y volaron nuestra caja de periódicos en el mismo centro del pueblo de Salem. Esos fueron algunos de los miembros de la comunidad Latinx. A ellos, ustedes saben quienes son, les ofrezco mi sincera gratitud y admiración por ser verdaderos activistas y cruceros de toda causa anti-humana. ¡Gracias mil, mis amigos!

Muchos pueden hablar de la comunidad LGBT de forma positiva o buscar información sobre nuestras luchas. Hay fuentes innumerables de información que están disponibles en la Internet y libros. Además siempre hay grupos para aliados y miembros de esta comunidad, para compartir, apreciar y entender nuestras diferencias, y celebrarlas juntos. Los suicidios de los jóvenes gay o transgénero, la matanza de las mujeres transgénero de color, la masacre de odio de Pulse Orlando, la alta incidencia de deserción escolar y el abandono que existe entre los jóvenes y adultos de la comunidad LGBT muestran un falta de conexión y empatía con el mundo que nos rodea.

El trato y maltrato que reciben muchos jóvenes de sus familiares, “amistades” y conocidos por simplemente ser gay, transgénero, lesbiana o bisexual es inquietante. No crea que no tiene culpa cuando actúa con desprecio, desdén y aislamiento (hasta abandono) hacia alguien de esta comunidad o cualquier otra. Esas actitudes son todas formas de “bullying”. No crea que es tan cristiano por comportarse de tal forma hacia criaturas de Dios que quizás no saben cómo defenderse. Dios no abusa de su creación. Dios crea perfecciones. Dios es amor.

Si lo que busca es aprender, hay muchas formas de hacerlo. Puede leer las columnas e historias que se han publicado en “The Rainbow Times” en español o inglés. También puede comprar y leer el libro: “Lo Que La Biblia Realmente Dice Sobre La Homosexualidad” escrito por teólogos que han estudiado la Biblia en sus lenguajes originales y no en las traducciones de hoy día. La mera interpretación de seres humanos, que carecen de la educación para poder hablar objetivamente sobre este tema, trae dolor a muchos miembros de nuestra comunidad. Si no le gusta que otros piensen incorrectamente de usted y que formen opiniones (de su raza y etnia, discapacidad, edad, sexo y credo) basadas en meros juicios humanos, entonces no le haga eso mismo a otros. “No diga nada si no tiene nada bueno que decir”, como dice ese dicho tan pertinente en inglés.

El uso de la religión como excusa o herramienta para herir a otros es un concepto anti-Dios. Siempre ha habido facetas del cristianismo oprimen a nuestra comunidad. Por esa razón mi espiritualidad viene mayormente del bien que puedo hacer por otros. Creo que dadas las experiencias que he tenido con muchos cristianos he decidido que prefiero ser una persona espiritual, y no necesariamente una cristiana en el sentido completo de la palabra.

Para esto les dejo saber de Mahatma Gandhi quien en unos momentos de su vida, de acuerdo a ciertos escritos, pensaba que “en el cristianismo estaba la solución a los prejuicios raciales y a las diferencias de casta” que afectaban a su país. Pero, lo que experimentó al conocer a los cristianos lo resumió en esta gran cita: “Me gusta tu Cristo… No me gustan tus Cristianos. Tus cristianos son tan diferentes a tu Cristo”. Estoy muy de acuerdo con él.

Por esa y muchas razones, creo en el concepto del Karma del Budismo y también en algo que he escuchado mucho y que dice, “lo que aquí se hace, aquí se paga”. El Karma es básicamente una energía que no se ve, que se genera tras sus acciones. Es una ley cósmica de retribución, de causa y efecto, dice la enciclopedia Wikipedia en español. Esa energía se forma a partir de sus acciones para con otros seres humanos, animales, etc. El karma que le desea a alguien, así, será el que la vida le devuelva. Sería honorable y justo que, por los niños y jóvenes LGBT, se eduquen sobre todo esto. Ya hemos perdido a muchos/as debido a estos comportamientos y juicios de muchos, dado el odio, la carencia de conocimientos y el desdén de entendernos y tratarnos con humanidad. Como dice su Biblia, “el que esté libre de pecado que tire la primera piedra”, y eso no implica que esté pecando por ser un miembro de esta comunidad; sólo implica que sé que soy pecadora, pues todos lo somos—pero no por ser gay.

*Graysen Martínez Ocasio es el publicador del periódico The Rainbow Times. Graysen tiene un bachillerato de Temple University en periodismo y una Maestría en Administración de Empresas de Marylhurst University. Le puede escribir a él aquí.

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